- La gente que juega al tetris humano en la playa, encajándose a tu alrededor como si eso fuera a hacer desaparecer las toallas a cambio de 20 puntos.
- Megaupload y su irritante manía de inventarse descargas simultáneas e inexistentes desde tu dirección I.P.
- Las señoras garrulas, gafosas y con vestido rojo que se atreven a criticar por televisión el final de la mejor serie de la historia sin haberse enterado de una puta mierda.
- Ese híbrido de programa de actualidad y "humor" que llaman "Tonterías las Justas".
- El momento en el que el agua, ya sea del mar o de una piscina, alcanza el nivel de las pelotas.
- El actual Presidente del Gobierno.
- El futuro Presidente del Gobierno.
- El anterior Presidente del Gobierno.
- Y el anterior también.
- La gente que, inmediatamente después de preguntarte qué carrera estudias, te pregunta "pero, ¿y eso qué salida tiene?".
- Los chistes y monólogos de la España cañí, perpetrados por personajes como Arévalo, Los Morancos o (y esto ya es el súmmum) Jaimito Borromeo.
- El "Sueño Americano", o que haya personas que tengan como máximo objetivo en la vida formar una familia clásica, con dos hijos, perro y un chalet con piscina.
- La idealización como Obras de Arte de mediocridades con argumento copiado de Pocahontas y bichos saltarines de color azul.
- Que alguien necesite más de 10 años para desarrollar esas mediocridades.
- La eliminación de mi favorit@ en cualquier "reality".
- La no eliminación de mi Bestia Negra en cualquier "reality".
- Mi madre en "Modo Víctima de sus Malvados y Vagos Hijos".
- Los brotes de patriotismo repentino causados por un simple deporte, por muy divertido que sea.
- Los proyectos quinceañeros de chonis que dan berridos a tu alrededor en el autobús al son de la última canción de Pitbull en su móvil rosa fucsia.
- Los Ayuntamientos que no tienen dinero para poner una Diskofesta en fiestas de su municipio, pero sí para organizar actividades en las que sus futuros y decrépitos votantes puedan bailar pasodobles y sevillanas.
- La falta de inspiración cuando más la necesitas.
- Tener que editar las entradas del blog cuando, una vez publicadas, deciden trastocar todo su formato.